NUNCA SE OLVIDEN DE DISFRUTAR


El otro día leí un discurso que Álex de la Iglesia exponía a unos estudiantes de cine. En él el Presidente de la Academia echaba de menos la ilusión, la emoción y la fraternidad que existe cuando cuatro amigos se ponen a hacer un corto sin recursos pero con muchas ganas, y lo contrastaba con el mundo profesional, donde la motivación principal, y más en estos tiempos, no siempre es hacer la mejor película posible, sino seguir pagando la hipoteca, la luz, el colegio de los niños y llenar la nevera cada semana. Esto en el mejor de los casos. En el peor, el motivo puede ser simplemente llevar un Mercedes, tener un chalé con piscina y un traje hecho a medida. O incluso dejar de pagar a los trabajadores, llevarse unos cuantos cientos de miles de euros y salir corriendo. Como la vida misma, señores.
Nosotros conocemos ambos mundos. El llamado con desprecio amateur y el llamado con esnobismo profesional. En uno hemos padecido la falta de medios pero disfrutado de poder hacer lo que nos dé la gana y del buen ambiente creado entre el pequeño equipo. En el otro hemos echado en falta la libertad creativa pero hemos disfrutado de disponer de medios técnicos impensables de otro modo.
Tras salir de la catarsis que mecionábamos en el post anterior hemos decidido ponernos manos a la obra. De momento estamos preparando un par de microcortos para internet sin prácticamente equipo técnico, pero para el que estamos recibiendo colaboraciones de amigos desde Alemania, China, Estados Unidos o, por supuesto, de aquí. ¿No les parece maravilloso que en una pequeña pieza de presupuesto cero se implique gente de lugares tan dispersos gracias a internet?
Pero también estamos trabajando en un par de guiones de largos cinematográficos. Porque no nos gustaría perder la parte buena de ninguno de los dos mundos audiovisuales.
En cualquier caso, nunca se olviden de disfrutar. Traten de no olvidarlo nunca. Por algo se metieron en este asunto, ¿no?